Hablar de la obra de Pablo Valenzuela, es hablar de #Chile de sus paisajes, de su geografía de sus jardines secretos y de los recónditas postales que enloquecen a los foráneos que parecieran tener mayor valor por nuestra naturaleza que nosotros mismos. Valenzuela que de profesión es Ingeniero civil se dedica hace 30 años de manera exclusiva a la fotografía, pero ya en los años 80 tomaba sus primeras imágenes en sus salidas a las montañas, intrépido como el sol encontró la fotografía.
¿Cómo es la mirada de Pablo Valenzuela en relación al paisaje?
Pablo Valenzuela tiene una mirada minimalista y diferente sobre lo que observa, se acerca para luego alejarse y encontrar las formas geométricas que encuentra, que construye, de ahí el nombre de su exposición que llega al #fotoarica2023 «Habitar la Inmensidad – Geometría del Paisaje» obra que estará presente en el programa oficial del Festival del 18 al 25 de agosto y con una exposición abierta hasta el 4 de septiembre.
#Los inicios de una obra llena de biodiversidad y rico patrimonio
Valenzuela que preserva visualmente los grandes paisajes de #Chile recorriendo de Arica a Punta Arenas lo desértico y polar del país para encontrar y encontrarse con un patrimonio rico en biodiversidad, partió utilizando una cámara de medio formato 6×6 que ayudo a generar y diseñar su obra que hoy es valorada a nivel nacional e internacionalmente como un gran legado artístico y porsupuesto fotográfico.
En definitiva Pablo Valenzuela, pareciera encontrar en la naturaleza esa mezcla entre lo nativo y agreste del en torno con la mano del hombre que se hace presente hasta en los espacios geográfico más inaccesibles de Chile de punta a punta que logra encontrar y conquistar esa geometría de la cual tanto nos habla en sus fotografías y que hoy se ven reunidas en el Festival Internacional de Fotografía de #Arica «Habitar la Inmensidad – Geometría del Paisaje» (Texto Christian Jamett)
Cita; De este modo, la naturaleza se transforma en materia reflexiva así la acción fotográfica deviene en una acción develadora. No es solo una preocupación por las nubes y sus formas arbitrarias sino más bien como estos cielos muchas veces amenazante, dialogan con la línea geográfica. Los cordones montañosos, los densos lagos, las nieves solidificadas son recogidos desde la mirada “hacia lo alto”, donde el viento modifica, traza, juega con los bienes naturales. Ya el propio Turner en el siglo XIX había buscado estos juegos lumínicos y atmosféricos en la pintura o bien en la temprana fotografía los trabajos de Le Gray. Sin embargo, la fotografía de Valenzuela, horada esta concepción descriptiva para adentrarse en una estética de la inmensidad. Al respecto, sus trabajos se encuadran en las investigaciones propuestas por las “equivalencias” realizadas por Alfred Stieglitz en su impulso incansable por renovar los cánones de la fotografía contemporánea.
(texto Gonzalo Leiva Quijada, Instituto de estética PUC de Chile)
